1) Glasé Limpiador. Toma una pequeña cantidad con tus manos secas y aplícalo en tu rostro con masajes circulares, dejando por último el área de los ojos. Aclara con agua, con la ayuda de nuestra esponja de mar. Tu piel quedará como no la habías visto y sentido antes, suave y radiante, lista para aprovechar al máximo los beneficios de los siguientes pasos.
2) Mousse Moringa & Tea Tree. Humedece la piel con agua tibia para abrir los poros. Aplica una pequeña cantidad del Mousse Cremoso Limpiador. Realiza suaves masajes circulares de manera ascendente en el rostro y cuello. Enjuaga con agua tibia. Repite este proceso diariamente y cuida de tu piel con el poder de las plantas.